miscelánea
Que razón tiene Antonio con que debe ser maravilloso viovir en medio de ninguna parte, vamos, que más me vale empezar a pensar así, todo el cinturón a cincuenta quilómetros de madrid, en redondo, ya ha sido formalmente descartado, previamente he comprobado a ciencia cierta que queda fuera de mis posibilidades económicas, pero no fuera por unos centímetros... vamos sobrepasa muy de largo la línea roja, incluso la negra de hectáreas más allá. Más vale que me guste ese lugar en medio de ninguna parte del que habla Antonio, si es barato, o como dicen los inmobiliarios "eso ya no existe" y te miran con una cara de "fíjate que pena, sin 300.000 disponibles, ¿Qué habrán hecho con su vida?"...
Ayer, mientras pensaba en éso veo en la tele el anuncio cruelísimo éste del niño que pone un anuncio en una farola "se busca médula", ¿no son insignficanes todos nuestros problemas al dado de la carita de ese niño que sólo pide una médula? que cosa tan pequeña y tán dificil de conseguir, incluso de dar. El caso es que ésos anuncios están hechos para remover conciencias, pero me temo que no cumplen su cometido, porque sólo remueven las conciencias de quienes ya las tienen removidas, quienes ya donamos sangre, y órganos, sólo porque no queremos ver esas miradas en los ojos de un niño, pero hay quien sólo piensa, hay pobre niño, a ver si le encuentran una medula; y si les pasara a ellos se sentirían la ostia de desgraciados y clamarian al cielo, a un dios, su dios, o despotricarían contra todas las ventanillas de la Seguridad Social "OIGA USTED DÓNDE HAN METIDO MI MEDULA", pero ésos no donarían, ni donarán.
Total, que no sé muy bien de qué ha ido este fin de semana.
Ayer, mientras pensaba en éso veo en la tele el anuncio cruelísimo éste del niño que pone un anuncio en una farola "se busca médula", ¿no son insignficanes todos nuestros problemas al dado de la carita de ese niño que sólo pide una médula? que cosa tan pequeña y tán dificil de conseguir, incluso de dar. El caso es que ésos anuncios están hechos para remover conciencias, pero me temo que no cumplen su cometido, porque sólo remueven las conciencias de quienes ya las tienen removidas, quienes ya donamos sangre, y órganos, sólo porque no queremos ver esas miradas en los ojos de un niño, pero hay quien sólo piensa, hay pobre niño, a ver si le encuentran una medula; y si les pasara a ellos se sentirían la ostia de desgraciados y clamarian al cielo, a un dios, su dios, o despotricarían contra todas las ventanillas de la Seguridad Social "OIGA USTED DÓNDE HAN METIDO MI MEDULA", pero ésos no donarían, ni donarán.
Total, que no sé muy bien de qué ha ido este fin de semana.
0 comentarios